Después de un extenso y tortuoso periodo, hoy concluyen las campañas, el domingo tendremos unos preciosos segundos de soledad para decidir o confirmar por quien votaremos, para esos segundos comparto algunas reflexiones personalísimas.
El voto debe emitirse con la razón y no con el corazón, las peores decisiones son las que se toman visceralmente, los sentimientos nublan la razón y nos llevan a precipitarnos o, a no pensar en consecuencias en el mediano y largo plazo.
El poder no cambia a las personas, sólo potencias sus vicios y virtudes, como el candidato ha sido a lo largo de su vida seguirá siendo una vez que ejerza el poder, si ha tenido arranques de ira los seguirá teniendo pero más fuertes y más seguidos, si ha malversado fondos lo seguirá haciendo pero con montos mayores, y así todo lo bueno y malo.
Entiendo que existe enojo social por corrupción y muchos problemas más, pero dar nuestro voto para castigar a otros puede acabar en un autocastigo.
Piense si en los últimos diez años ha mejorado en algo su patrimonio, ¿ha comprado coche, mejoró su vivienda, ha salido de vacaciones, tiene mejor comunicación?
¿Su entorno es mejor? ¿tiene acceso a mejores vialidades, museos, parques, infraestructura deportiva?
¿Se ha beneficiado de algún programa social como el seguro popular, las guarderías o escuelas de tiempo completo?
¿Cuáles han sido los resultados de los candidatos en sus trabajos anteriores? ¿cómo responde su candidato a la crítica o ante los que piensan distinto?
¿Cómo y quiénes son las personas cercanas a su candidato, son honestas, son delincuentes?
¿Por qué sí para todo queremos al mejor, al más preparado, para la presidencia de la república debemos conformarnos con el menos peor? ¿Qué queremos un buen candidato o un buen presidente?
Imagine que tiene una empresa familiar, ¿a cuál de los candidatos presidenciales elegiría para administrarla? ¿A cuál de los presidenciables elegiría como maestro universitario para Usted o sus hijos?
Si pudiera migrar con toda la familia, ¿qué país elegiría, uno capitalista como Estados Unidos o uno socialista como Venezuela? ¿Si ganara un candidato populista, Usted tendría algo que perder con políticas populistas?
Punto Final
Falleció “mi abuela” Aurora López Domínguez, lo lamento profundamente pero le doy gracias a la vida por haberme acercado a tan generosa, ejemplar y fuerte mujer.
Imagen, Zacatecas, Zac. 27 de junio de 2018.